Al volver, en la Autopista AP1 entre Burgos y Vitoria nos encontramos con un atasco monumental, la causa un brutal accidente en el que dos coches de San Sebastián estaban completamente destrozados por lo que parecía un choque frontal, dudo que hubiera supervivientes visto lo visto.
Y claro, uno se acojona al ver con que facilidad se puede ir toda una vida en un estúpido segundo y uno toma sus precauciones, como no ir demasiado rápido, sin embargo ves como niños que apenas tendrán 20 años, con coches potentes, como BMW o Audi, se te ponen a escasos centimetros de tu carrocería cuando estás adelantando, les ves tomar las curvas de forma absolutamente suicida y de comportarse como verdaderos hijos de perra en la carretera.
Esos niñatos (y no tan niñatos) han visto, al igual que yo, el brutal resultado de hacer el imbecil en la carretera y aun así ellos se comportan como si no tuvieran ningún aprecio ni por su vida ni por la de los demás.
En Francia han tomado unas potentes medidas para frenar a esos asesinos y dicen que están teniendo éxito, a ver si aquí, si algún día se aplican, también logran frenar a estos asesinos con volante que sufrimos en las carreteras.