El libro en cuestión es "Primeros auxilios en tipografía" de Hans Peter Willberg y de Friedrich Forssman y con sus apenas cien páginas me he dado cuenta lo poco que nos damos cuenta del buen hacer de los tipógrafos y diseñadores y de que debido a que cualquiera puede hacerse una publicación con un ordenador y ya no se precisa ni de tipos móviles, ni cajas ni nada de eso, la gigantesca cantidad de chapuzas que hay circulando por el mundo y de como tragamos con cualquier cosa por patética que sea.
En fin, desde aquí mi modesto homenaje.