Pleasantville es un film norteamericano de 1998 que tiene como protagonista al actor ese del Spiderman (Tobey Maguire), un pobre chaval de finales de los 90, en una familia desestructurada y con una hermana que sólo quiere ser “popular” y para ello no le importa hacer lo que haga falta. Por un acto de magia acaba, junto con su hermana en una serie de televisión en blanco y negro de los años 50 llamada precisamente Pleasantville.
Si no la has visto, esto es un spoiler, aunque ya tiene sus añitos.
Esta ciudad es un mundo “perfecto” a imagen y semejanza de lo que les gustaría a los fundamentalistas (includos los de hazteodiar aunque estos incluirían a cuatro o cinco curas, una pareja de la guardia civil y al boticario), todo el mundo hace lo que debe hacer, nadie se sale del tiesto, las mujeres son simples esclavas, no hay libros, parece que los hay para cubrir las apariencias pero están vacios, sólo hay portadas y sin contenido, la historia es inamovible y, por supuesto, todo es en blanco y negro.
En este mundo “perfecto” llegan estos dos hermanos que, sin quererlo comienzan a revolucionarlo todo, la hermana, en un momento de aburrimiento, se pega el lote con un chaval y le hace descubrir el sexo, cosa que no existía en ese mundo “hazteoir” tan patético y a partir de ahí empieza a crecer la libertad, unos la descubren a través del sexo, otros a través de la literatura, los libros estaban en blanco, pero al querer leerlos ocurre el milagro de que se escriben, otros por la música y otros por la pintura, la cultura como revolución.
La forma de representar la metáfora de la libertad en esta película es de lo más bella, es ir añadiendo color en un mundo en blanco y negro, aquellos que la logran aparecen en color, mostrando al mundo que son libres, incluso a su pesar.
Por supuesto esto supone que las sacrosantas tradiciones quedan rotas y los hombres grises (me es inevitable pensar en los de hazteoir) quieren imponer sus puntos de vista de la forma habitual, violencia contra la gente coloreada, destrucción del arte, quema de libros y prohibiciones, muchas prohibiciones.
Si alguien rompe dichas prohibiciones hacen un juicio totalmente falto de garantías, estamos entre “amigos” ¿no? y la gente libre debe permanecer lejos de las buenas gentes grises.
Y al final (bueno, si la has visto ya lo sabrás y si no, procura verla).
Esta es una bella metáfora, la he incluido en la categoría de nudismo no por que aparezcan desnudos (alguno que otro en un par de pinturas) sino por la lucha por la libertad (y de la discriminación que sufren los diferentes), no se trata de una gran revolución con muchos muertos y mucha sangre, no se trata de una historia brutalmente dramática, es algo mucho más simple y sencillo, la gente reclama su libertad, se muestra firme a la hora de conseguirla y le hace frente a los hombres grises que la han declarado ilegal.